viernes, 11 de julio de 2008

QUE ERA EL URIM Y TUMIN

La historia concerniente al Urim y Tumim, o intérpretes, como se les llama en el Libro de Mormón, no está muy clara. Abraham tuvo el Urim y Tumim, por medio del cual recibió revelaciones acerca de los cuerpos celestiales, como él lo ha escrito en el Libro de Abraham. Qué fue de ellos después de su muerte, no lo sabemos. Aarón también tuvo el Urim y Tumim, y es evidente, por lo que leemos en la Biblia, que se transmitieron entre los sacerdotes de Aarón de generación en generación. El señor dio al hermano de Jared el Urim y Tumim, que él trajo consigo a este continente. Estos eran separados y distintos del Urim y Tumim que poseyó Abraham y que hubo en Israel en los días de Aarón. La historia de éstos es en parte la siguiente: “Y he aquí, cuando vengas a mí, las escribirás (las revelaciones) y las sellarás a fin de que nadie pueda interpretarlas; porque las escribirás en un lenguaje que no se podrán leer. Y he aquí, te daré estas dos piedras y también las sellarás junto con las cosas que escribas. Porque he aquí, he confundido el idioma que escribirás; por tanto, haré que en mi propio y debido tiempo estas piedras engrandezcan a los ojos de los hombres las cosas que tú escribirás...” “Y el Señor le dijo: Escribe estas cosas y séllalas; y en mi propio y debido tiempo las mostraré a los hijos de los hombres. Y sucedió que el Señor le mandó que sellara las dos piedras que había recibido, y que no las mostrara sino hasta que el Señor las manifestase a los hijos de los hombres.” LOS NEFITAS TUVIERON EL URIM Y TUMIM JAREDITA. Ninguna información tenemos de que Lehi haya traído consigo el Urim y Tumim de América. El Señor dio a Lehi el Liahona, el cual era una esfera que le indicaba el camino que debía seguir y ocasionalmente aparecían sobre él mensajes escritos, pero no era el Urim y Tumim. El rey Mosíah tenía “dos piedras que estaban colocadas en los dos aros de un arco”, llamadas intérpretes por los nefitas, con las cuales él tradujo la historia jaredita, y éstas se transmitieron de generación en generación para el fin de interpretar idiomas. Cómo llegaron a manos de Mosíah estas dos piedras o Urim y Tumim, la historia no nos dice, aparte de informarnos que era “un don de Dios” Mosíah tenía este don o Urim y Tumim antes que el pueblo de Limhi descubriera los anales de Eter. Pudieron haberse recibido cuando le fue traída a Mosíah la “piedra grande con grabados” las cuales él interpretó por “el don y poder de Dios”. Pudieron habérsele dado a él o a algún otro profeta antes de su época, tal como los recibió el hermano de Jared, es decir, del Señor. Parece ser evidente, según las enseñanzas del Libro de Mormón que el Urim, y Tumim, o dos piedras, que fueron dadas al hermano de Jared, eran las que Mosíah poseyó. Al hermano de Jared le fue mandado que sellara sus escritos de la visión que había tenido cuando se le apareció Cristo, para que su pueblo no pudiera leerlos. Esta visión se escribió en un idioma que fue confundido, porque no había de revelarse sino hasta después de la resurrección de Cristo. También fueron sellados el Urim y Tumim para que no se usaran con el fin de interpretar el relato sagrado de esta visión, sino hasta que llegara el tiempo en que el Señor le concediera al hombre interpretarlo. Cuando se revelara se habría de interpretar con ayuda del mismo Urim y Tumim.JOSÉ SMITH RECIBIÓ EL URIM Y TUMIM JAREDITA. El pueblo de Limhi trajo a Mosíah una historia “grabada sobre planchas de metal”, historia que Mosíah interpretó con la ayuda de “dos piedras que estaban colocadas en los dos aros de un arco”, y la cual contenía un relato de los jareditas.Al traducir esta historia, Mosíah no permitió que se diera al pueblo esa parte en particular, que el Señor había prohibido que se revelara sino hasta después que El fuese levantado sobre la cruz. Estas revelaciones sagradas dadas al hermano de Jared no se dieron a conocer a los nefitas, así como muchas otras cosas, sino hasta después de la resurrección de Cristo. Después de la aparición del Salvador a los nefitas, se reveló a ellos la visión del hermano de Jared. Cuando Moroni hizo su compendio de los anales de Eter, él copió en su historia la visión del hermano de Jared. Sin embargo, por mandato del Señor, Moroni también selló las cosas mayores de esta visión, e igualmente los intérpretes —que eran las mismas “dos piedras” que había tenido el hermano de Jared— para que esta visión no se diera a conocer ni aun en nuestra época entre los gentiles, en el día de su iniquidad; no se podría revelar sino hasta “el día en que se arrepientan de su iniquidad, y se vuelvan puros ante el Señor”. De manera que hoy no tenemos la plenitud del relato escrito y sellado por el hermano de Jared, y vuelto a sellar por Moroni. Se le prohibió al profeta José Smith traducir esta parte de la historia. No hemos recibido, pues, sino la “menor parte”. Con el pectoral y las planchas del Libro de Mormón, José Smith recibió el Urim y Tumim, que Moroni ocultó para que saliera en los últimos días, como el medio por el cual se pudiera traducir la historia antigua, siendo el mismo Urim y Tumim que se dio al hermano de Jared. LA PIEDRA DEL VIDENTE NO SE USÓ EN LA TRADUCCIÓN DEL LIBRO DE MORMÓN. Se nos ha enseñado, desde los días del Profeta, que se devolvió al ángel el Urim y Tumim con las planchas. Nada se dice en la historia de que el Profeta haya tenido el Urim y Tumim después de la organización de la Iglesia. Informes de traducciones hechas por medio del Urim y Tumim después de esa fecha son evidentemente errores. Se ha dicho que el Urim y Tumim se hallaba sobre el altar en el Templo de Manti, cuando se dedicó ese edificio. Sin embargo, el Urim y Tumim del cual así se habla, era la piedra del vidente que poseyó el profeta José Smith en días anteriores. Esta piedra del vidente ahora está en poder de la Iglesia.Aun cuando algunos escritores han dicho que el profeta José Smith usó una piedra del vidente parte del tiempo en su traducción de los anales, y la información indica el hecho de que efectivamente tuvo en su poder tal piedra, no hay ninguna declaración auténtica en la historia de la Iglesia que manifieste que se usó tal piedra en la traducción. Estos informes son simplemente rumores, y yo personalmente no creo que se usara esta piedra para tal propósito. La razón que doy para esta conclusión se halla en la declaración del Señor al hermano de Jared cual se lee en Eter 3:22-24. Estas piedras, el Urim y Tumim, que se dieron al hermano de Jared se preservaron para este propósito mismo de traducir los anales, tanto de los jareditas como de los nefitas. Además, Moroni recalcó al Profeta el hecho de que se daban estas piedras precisamente para tal propósito.Difícilmente parece razonable suponer que el Profeta se valdría de algo evidentemente inferior en estas circunstancias. Es tan fácil que una historia de tal naturaleza se difunda debido al hecho de que el Profeta poseyó una piedra del vidente, que bien pudo haber usado para otros propósitos.

1 comentario:

Omar dijo...

Es imprescindible que hagas citas de todo texto que expongas. Sobre todo en un articulo en que el lector requiere la fuente desde donde haces afirmaciones. Sea escritura libro o revista.Si no se lee como si fueran tuyas las citas